El descenso de la presión barométrica es la causa básica de todos los problemas de hipoxia en las fisiologías de las grandes alturas, debido a que a medida que disminuye la presión barométrica, la presión parcial de oxígeno desciende de forma proporcional, permaneciendo en todo momento ligeramente por debajo del 21% de la presión barométrica total (a nivel del mar es de 760 mph).
PO2 alveolar a diferentes alturas.
El dióxido de carbono y el vapor de agua disminuyen el oxígeno alveolar incluso a grandes alturas. El dióxido de carbono pasa desde la sangre pulmonar al interior de los alvéolos. También el agua se evapora desde las superficies respiratorias al aire inspirado. Por lo tanto estos dos gases disminuyen el oxígeno de los alvéolos con lo que reducen la concentración de oxígeno.
La presión del vapor de agua se mantiene en los alvéolos a 47 mph siempre que la temperatura corporal permanezca normal, independientemente de la altitud. En el caso del dióxido de carbono, en la exposición a las grandes alturas, La PCO2 alveolar desciende desde un valor normal (40 mph) a cifras mucho más bajas. En la persona aclimatada, que como posteriormente se verá aumenta su ventilación en más de cinco veces, se produce un descenso aproximado de 7 mph, por aumento de la respiración. Como cabría esperar, las presiones de estos dos gases afectan al oxígeno alveolar. Si la presión barométrica desciende a 253 mph (valor medido en la cima del Everst), podemos ver como de este total, 47 mph deben ser de vapor de agua, dejando sólo 206 mph para todos los demás gases. En la persona aclimatada, 7 de los 206 mph deben corresponder al dióxido de carbono, con lo que sólo quedan 199 mph. Si el organismo no emplease oxígeno, una quinta parte de estos 199 mph serían de oxígeno y las cuatro partes restantes para el nitrógeno.
Parte de este oxígeno alveolar, pasaría a la sangre, con lo que quedaría una presión de oxígeno de unos 33 mph en los alvéolos.
Al nivel del mar, la PO2 alveolar es de 104 mph, a 6.000 metros de altitud desciende hasta los 40 mph en la persona no aclimatada, pero sólo a 53 mph si esta persona lo está. (La diferencia entre ambas personas es que la ventilación alveolar es cinco veces mayor en la aclimatada).
Saturación de la hemoglobina con oxígeno a diferentes alturas.
Hasta una altitud de unos 3.000 metros, incluso respirando aire atmosférico, la saturación de oxígeno arterial permanece como mínimo en un 90%. Por encima de los 3.000 metros, la saturación arterial de oxígeno desciende rápidamente, como muestra la curva discontinua adjunta (FIG.2), hasta que es ligeramente menor del 70% a los 6.000 metros y mucho menor a alturas superiores.
Efectos de la respiración de oxígeno puro sobre la presión alveolar a diferentes alturas.
Cuando una persona respira oxígeno puro en lugar de aire, la mayor parte del espacio de los alvéolos que antes ocupaba el nitrógeno es ocupado ahora por el oxígeno. Por lo tanto a 9.000 metros, un aviador puede tener una presión parcial de oxígeno alveolar de 139 mph en vez de los 18 mph que tendría si respirase aire ambiental.
La curva continua de saturación de la hemoglobina, mostrada anteriormente, muestra la saturación de oxígeno por la hemoglobina a diferentes alturas cuando se res-pira oxígeno puro. La saturación permanece por encima de del 90% hasta que el aviador asciende a unos 13.000 metros y luego cae rápidamente hasta el 50%, a unos 14.100 metros.
Efectos agudos de la Hipoxia.
Parte de los efectos agudos de la hipoxemia, la cual comienza a una altura aproximada de 4.000 metros, son somnolencia, lasitud, fatiga mental y muscular, a veces cefalea, nauseas e incluso euforia. Todo ello progresa a una fase de mioclonías o convulsiones tras superar la barrera de los 6.000, y termina, por encima de los 7.500 metros en coma y una muerte segura y en poco tiempo si la persona en cuestión no está aclimatada.
Uno de los defectos más importantes de la hipoxia es la reducción del rendimiento mental, lo que ocasiona pérdidas de memoria e incluso puede provocar la pérdida total del conocimiento.
FIG. 3 Respiracion a grandes alturas en personan no aclimatadas |